Con diez desde los 30 segundos, el Fogao venció 3-1 al Atlético Mineiro de Gabriel Milito y conquistó el máximo certamen continental por primera vez en su historia.
BOTAFOGO es el campeón de la Copa Libertadores 2024. En una final dramática, disputada en el Estadio Monumental, los de Río de Janeiro vencieron 3-1 al Atlético Mineiro de Gabriel Milito tras haberse quedado con diez jugadores desde los 30 segundos y conquistó el máximo certamen continental por primera vez en su historia.
Además de levantar el trofeo más codiciado del fútbol sudamericano, el Fogao se quedó con el último de los 32 cupos del Mundial de Clubes de 2025, accedió a la Copa Intercontinental que se disputará en Qatar en diciembre y enfrentará a Racing, flamante campeón de la Copa Sudamericana, en la Recopa en febrero.
El legendario Novak Djokovic, en Buenos Aires para participar de la despedida de Juan Martín del Potro, fue el encargado de acomodar el trofeo en el Monumental. Además, le hizo entrega al árbitro argentino Facundo Tello de la moneda con la que se realizó el sorteo antes del inicio.
El partido comenzó de forma increíble. A los 30 segundos, en la primera jugada, Gregore la metió un tremendo planchazo en la cabeza a Fausto Vera y Tello no dudó: roja directa y Botafago, con diez hombres y una eternidad por delante. Fue la expulsión más rápida en la historia de las finales de Copa Libertadores.
Artur Jorge optó por no realizar modificaciones y el tiempo le dio la razón. Luego de media hora de asedio, Botafogo comenzó a jugar desde los pies de Thiago Almada y así llegó el 1-0. El argentino condujo, Marlon Freitas probó desde la puerta del área y Luiz Henrique se encontró con un rebote para abrir el marcador. Locura de los cariocas en Núñez.
Todavía groggy por el gol, los de Milito sufrirían un nuevo cachetazo. Éverson fue abajo en busca de cortar un ataque, pero Luiz Henrique llegó a puntear la pelota antes y el arquero le cometió penal. Tello no lo había sancionado, pero tras revisar la acción en el VAR rectificó su decisión.
Alex Telles -ex Porto, Inter, Manchester United y Sevilla, entre otros- se hizo cargo de la ejecución. Remató a su derecha, Éverson fue hacia el otro lado y anotó un 2-0 inesperado en el comienzo del encuentro.
Milito pateó el tablero en el entretiempo: adentro Vargas, Bernard y Mariano y afuera Lyanco, Vera y Scarpa. Modificaciones que rápidamente le rendirían frutos.
A los 47′ Hulk ejecutó un córner al corazón del área, la pelota sobró a todos menos al chileno, que la atacó con un cabezazo y descontó para Atlético Mineiro.
El conjunto de Belo Horizonte contó con un par de oportunidades para forzar la prórroga -una de ellas inmejorable en los pies de Vargas-, pero falló en la definición y en contrapartida chocó con la eficacia de Botafogo.
En el último minuto del partido, Junior Santos la aguantó por derecha, escapó entre dos para meterse al área y tras tocar al medio, le quedó el rebote para decretar la victoria 3-1 del flamante campeón.