Twitter, dicen, es un mundo aparte. De esa afirmación pueden dar fe los usuarios de esa red social que fueron testigos este lunes 1 de enero de una imagen surrealista: Manuel Adorni, vocero presidencial, se hizo eco de una publicación que, a las claras, parecía falsa, con el solo objetivo de defender las ideas neoliberales que promociona su jefe.

El cruce de Adorni fue con otro dirigente que cayó en la misma fake news: el excandidato de la izquierda, Jorge Altamira.

 

«Gracias al DNU de Milei, este empresario llamado Gustavo Fring está dispuesto a invertir cerca de 9.000 millones de dólares para traer su exitosa cadena de comidas rápidas a Argentina. Por más inversores como él, aplausos para Gus», escribió un usuario de la red social Twitter.

Para aquellos que no vieron ni Breaking Bad ni Better Call Saul, «Gus» Fring es un personaje ficticio que utiliza una franquicia fast food -Los Pollos Hermanos- para lavar dinero del narcotráfico. El chiste encajaba perfecta en esta época d edesregulación y habilitación para el blanqueo de dólares sin penalización.

Altamira, en tanto, no se percató de la ironía y respondió a la publicación. “Más comidas rápidas para menos comensales”, acotó el dirigente de la izquierda, criticando el esquema de gobierno de Javier Milei.

Pero lo más bizarro llegó minutos después: Adorni, haciendo gala de su estilo sarcástico, trató de refutar la posición de Altamira, sin percatarse que la presunta «lluvia de inversiones» no era otra cosa que una fake news. «Estimado Jorge: las inversiones mejoran salarios, dan oportunidades y promueven crecimiento disminuyendo la pobreza y mejorando la calidad de vida de la gente. Lo invito a escapar de las encerronas ideológicas y sumarse a las ideas de la libertad. Le mando un fuerte abrazo”, escribió Adorni para coronar el insólito cruce.