Corresponden a los tres vencimientos de octubre, que fueron cancelados en un solo desembolso. Las reservas del Banco Central perforaron los u$s22.000 millones

El Gobierno efectivizó el pago de u$s2.600 millones (el equivalente a SDR 1975 millones, la unidad en que se expresan los Derechos Especiales de Giro) al Fondo Monetario Internacional (FMI), correspondiente a los tres vencimientos previstos para octubre, que acordó cancelar en un solo desembolso.

El pago se realizó con DEGs que tenía en su haber el Banco Central (BCRA) y yuanes del nuevo swap con China por u$s6.500 millones que el presidente Alberto Fernández firmó con su par chino, Xi Jimping, hace dos semanas.

Las reservas del BCRA quedaron en u$s21.861 millones, el nivel más bajo desde el 2006, luego de que Néstor Kirchner decidió cancelar la totalidad de la deuda con el organismo multilateral en un solo pago.

El ministro de Economía y candidato presidencial por Unión por la Patria, Sergio Massa, había adelantado la semana pasada que el país procedería a «precancelar los vencimientos del FMI para que no haya incertidumbre alrededor de ese tema».

El calendario del FMI preveía tres vencimientos para este mes: el 6 de octubre por u$s1.280 millones, el 12 por otros u$s640 millones y un tercero por u$s673 millones el último día hábil. Los mismos podían ser saldados todos juntos a fin de mes, tal como sucedió.

La próxima revisión con el Fondo, para destrabar más recursos, será en noviembre, y todo indicaría que comenzará formalmente una vez finalizadas las elecciones generales, que en caso de extenderse a un eventual ballotage será luego del 19 de noviembre fecha prevista para una hipotética segunda vuelta.

El lunes 6 de noviembre, 13 días antes de la segunda vuelta entre Sergio Massa y Javier Milei, el Gobierno debería realizar una nueva cancelación de intereses por u$s820 millones que vencen en noviembre.

La fecha coincide con el Día del Bancario. Como el sistema financiero no funcionará en su mayoría, se espera que se corra la fecha prevista para el pago.

Será el último desembolso antes de la próxima evaluación de metas del FMI y, por tratarse de una cancelación de intereses, el pago es impostergable, de acuerdo a las normas que fija el organismo.