El gobernador bonaerense planteó que «no podemos darnos el lujo de que se destruya nuevamente la línea de bandera que tanto nos costó recuperar». «Si el Gobierno plantea liquidarla, venderla o cerrarla, que sepa que no lo vamos a permitir; Aerolíneas y la Patria no se venden», subrayó.
El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, presentó este lunes un plan para evitar la privatización de Aerolíneas Argentinas. «Es un instrumento central para el desarrollo, la conectividad. No es que nadie quiere Aerolíneas, la Provincia si la quiere», sostuvo.
La propuesta del mandatario fue comprar acciones de la empresa y convocará a otras provincias a participar del paquete de títulos de la línea de bandera, en caso que el gobierno de la Nación «quiera liquidarla».
«La provincia plantea que si hay intención de transferir nosotros empezamos un camino con gobernadores y trabajadores: vamos a trabajar también con sector aerocomercial y turístico porque creemos que es de las mejores del mundo», afirmó Kicillof en conferencia de prensa, a dos días de un nuevo aniversario de la compañía, fundada el 7 de diciembre de 1950.
«El Gobierno nacional ha amenazado con venderla, disolverla, llevarla a la quiebra. Si la Nación plantea venta de paquete accionario o transferencia a trabajadores o declararla en quiebra o disolverla, nosotros lo vamos a impedir, en la medida de lo posible», expresó el mandatario bonaerense.
«Ante la imposibilidad que tiene el gobierno nacional de gestionar nada queremos que se deje de mentir. No nos podemos dar el lujo para que liquide venda o mal venda a Aerolíneas. Si el Gobierno plantea liquidarla que sepa que el gobierno de la provincia la va a sostener. Aerolíneas no se vende: hay 21 destinos del interior a los que solo viaja la línea de bandera. Destinos a los que llama no rentables», remarcó.
«Quieren cerrar vuelos. Estamos en la antesala de una estafa», subrayó. «Hoy estamos a la espera pero preparándonos para una decisión: la provincia de Buenos Aires empieza a explorar todos los caminos para dar una respuesta. No estamos en condiciones de que el Gobierno destruya Aerolíneas . No podemos atravesar un vaciamiento ni una estafa. Nosotros vamos a impedir el desastre. La provincia tiene diferentes caminos, algunos necesita de la Legislatura», enfatizó.
Según Kicillof, los beneficios económicos para la provincia de Buenos Aires rondan los u$s2665 millones, sin contar impuestos, contribuciones y tasas. «Esa será la pérdida para la provincia si se empiezan a perder vuelos», anticipó.
«Hoy llamamos a trabajar junto con los gobernadores y los trabajadores para sacarle más el jugo: la provincia de Buenos Aires tiene diez millones de pasajes, tiene mucho movimiento. Es fundamental que eso no cese. Si la vendieran por su tasación patrimonial, según los últimos balances, es dársela a alguien. No es solo recibirla sino sacarle más el jugo todo lo posible: hubs, destinos regionales. Fomentar el turismo, dado que muchos los vuelos van a nuestros aeropuertos. Hay mucho movimiento, para la provincia de Buenos Aires es fundamental» concluyó Kicillof.