En el Estadio Pedro Bidegain, el Ciclón de Insua le ganaba a La Academia de Gago, pero tras la expulsión de Rafa Pérez Sigali lo empató y terminaron 1-1. Hubo muchas polémicas y mucho VAR.
el Estadio Pedro Bidegain, por la cuarta jornada de la zona B de la Copa LPF. El gol fue de Federico Girotti de penal, debido a una mano en el área de Racing que Rapallini tuvo que revisar en el VAR. Pero en el cierre de la primera mitad fue expulsado Rafa Pérez en el local y depués llegó el empate mediante Sigali. El clásico en el Bajo Flores tuvo polémicas, mucha actividad en el VAR y terminó con un empate 1-1.
El Azulgrana se puso en ventaja a los 11 minutos del primer tiempo, a través de un penal convertido por Federico Girotti, luego de que el árbitro principal Fernando Rapallini omitiera sancionar una mano dentro del área del defensor Gonzalo Piovi, pero que corrigió con la tecnología. El elenco de Avellaneda estableció la igualdad definitiva, a los 53m. del primer período, con un disparo desde media distancia de Leonardo Sigali. En esa misma etapa inicial, el árbitro Rapallini tampoco vio en primera instancia un puntapié del colombiano Rafael Pérez que luego, revisión mediante la tecnología, resultó expulsado en el equipo que dirige el DT Rubén Insúa.
Con este marcador, el equipo de Boedo se mantiene con 52 puntos en la tabla anual, en zona de clasificación a la próxima Libertadores. En cambio, el club de Avellaneda acumula 44 unidades y estaría ganando un cupo para la edición 2024 de la Copa Sudamericana.
Durante la primera mitad, los dos equipos buscaron presionar alto, pero en ese contexto, el local insinuó con los desenganches de Malcom Braida y el desequilibrio que generalmente aporta Nahuel Barrios. A los 7, Agustín Giay ensayó un tiro que rebotó en el brazo de Piovi. En una primera instancia, Rapallini no sancionó la infracción, aunque la colaboración desde la cabina de tecnología resultó decisiva para decretar la pena máxima. Girotti se hizo cargo de un remate bajo y junto al poste derecho de Gabriel Arias para adelantar al Ciclón. Con la ventaja a su favor, San Lorenzo apostó a la receta que mejor le sale: cederle la pelota a su adversario, acomodarse unos metros más atrás en el campo de juego y buscar salir rápido de contra.
El equipo de Avellaneda, con el colombiano Juan Fernando Quintero como abanderado en la zona central, presionó con mayor consistencia, aunque le faltó ser profundo como para llegar seguido a la valla de Batalla.
Precisamente, el exjugador de River Plate tuvo una ocasión clara para marcar a los 18m., con un remate desviado.
Sobre los 34m., Rapallini vio penal por una mano aparente de Braida. Pero el VAR corrigió la determinación y convenció al árbitro de no sancionar el disparo desde los 12 pasos en favor de la escuadra que dirige Fernando Gago.
A los 47m., el colombiano Pérez metió un planchazo a Juan Ignacio Nardoni y el juez central, asistido desde la cabina de tecnología, procedió a mostrarle la tarjeta roja al zaguero azulgrana.
Cuando se jugaba el octavo minuto de descuento, un zapatazo de Sigali, desde fuera del área, se convirtió en la igualdad.
En el complemento, el DT Insúa decidió el ingreso de Carlos Insaurralde para rearmar la defensa por la expulsión del colombiano Pérez, mientras Racing estuvo cerca del segundo con un remate de Colombo que pasó cerca del ángulo derecho del arco de Batalla.
Con uno menos en cancha, el equipo local prefirió mantener el resultado cediéndole el manejo del balón a un rival, que careció de profundidad.
Así, con la combatividad de un San Lorenzo que mordió en todos los sectores y con un Racing que intentó pero no tuvo potencia en los metros finales, se armó un partido vibrante, que encontró a la igualdad como atributo lógico para lo que uno y otro ofreció en campo de juego.