En el Estadio Madre de Ciudades, el Canalla festejó en la final con un golazo de Maxi Lovera y se quedó con el título. El Calamar terminó con diez por la expulsión de Suso.
Rosario Central le ganó por 1-0 a Platense en una apasionante final de la Copa de la Liga Profesional 2023 en el Estadio Único Madre de Ciudades y es el nuevo campeón del fútbol argentino. Con un golazo de Maximiliano Lovera y un Fatura Broun impasable, el Canalla de Miguel Ángel Russo coronó una campaña impecable para que sus hinchas puedan festejar nuevamente un título tras la Copa Argentina 2018.
En el primer tiempo hubo mucho vértigo y no tanta emoción, lo que cambiaría en el último tramo. Antes, apenas había avisado Lucas Ocampo con un tiro controlado por Jorge Broun. Recién pasada la media hora ambos equipos comenzaron a jugar más profundo en ataque, y hubo cruce de chances con un nuevo intento de Ocampo frustrado por Fatura, Agustín Sandez lo tuvo con un cabezazo que tapó Ramiro Macagno y Raúl Lozano respondió con un disparo desde afuera apenas desviado.
Y a los 39 llegó la apertura del marcador. Lovera encaró por el medio de la defensa calamar, dejó pagando a Ignacio Vázquez con un caño y, en diagonal hacia la izquierda, definió al segundo palo de Macagno para concretar un verdadero golazo. Antes del descanso, Nicolás Morgantini tuvo el empate mano a mano con Broun, pero remató muy alto.
El complemento empezó de forma dramática. A los segundos, Facundo Mallo fue por una pelota junto a Mateo Pellegrino y hubo un fuerte choque de cabezas que terminó con el defensor cayendo muy feo, con sangre en la nariz y conmocionado. Fue reemplazado por Nicolás Servetto y hospitalizado, y las informaciones posteriores fueron tranquilizadoras.
Volviendo al trámite, Jaminton Campaz metió un disparo bombeado en el travesaño, y más tarde Maximiliano Zalazar, que entró encendido en el equipo de Martín Palermo, remató al ángulo pero se topó con Broun. Con el correr de los minutos, las posturas se radicalizaron en un esperable Platense proponiendo y Central esperando de contra. Y en una de esas, Campaz encaró por el medio y Gastón Suso lo cortó para ganarse la segunda tarjeta amarilla. Los de Vicente López se complicaban aún más.
Igual, al partido le quedaba un extenso tiempo adicionado que agrandó la figura de Broun y aportó una polémica. El guardameta apareció ante Servetto y otro ingresado, Leonel Picco, y en la última Juan Cruz Komar le cabeceó la nuca a Franco Díaz, todo el Calamar pidió penal pero ni el árbitro ni el VAR se aludieron. Enseguida se cerró el partido y toda la fiesta fue canalla, un campeón que supo ir de menor a mayor y coronar su semestre a lo grande.