Se registró una baja del gasto total de las familias, de la estadía media y también del gasto diario respecto del año pasado.
A pesar de que cerca de 4,9 millones de turistas se movilizaron en estas vacaciones de invierno, se registró una caída del consumo del orden del 11,9 por ciento respecto al año pasado, informó la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
Varios de los indicadores que miden la intensidad del consumo de parte del turismo mostraron bajas, a tono con lo que viene pasando en supermercados, centros de compra y otros tipos de comercios, cuyas ventas son afectadas por el deterioro del poder adquisitivo de los salarios, jubilaciones y otro tipo de ingresos.
Por ejemplo, el gasto total ascendió a 1,2 billones de pesos en las ciudades que integran el circuito turístico del país, lo que implica una merma del 22,2 por ciento con relación a 2023, a precios constantes. Por su parte, la estadía media bajó a 4,1 días y el gasto diario en promedio fue de 59.890 pesos que, a precios reales, (es decir, descontando la inflación) resultó 3 por ciento inferior a la temporada pasada.
«Fue un invierno frío, con las zonas de playas menos concurridas que otros años, y un visitante que se inclinó por opciones termales, montañas, nieve y campo. Muchas ciudades compararon este invierno con los resultados obtenidos en la pre pandemia, entre 2017 y 2019», afirmó la CAME en un comunicado.