Su hija, María Ester Peralta, fue secuestrada embarazada de cinco meses

Con hondo pesar, Abuelas despidieron a Petrona Catalina Izaguirre de Peralta, que partió ayer sin encontrar a su nieta o nieto nacido en cautiverio.

El 29 de abril de 1976, su hija, María Ester Peralta, embarazada de cinco meses, fue secuestrada junto a sus dos hijos -María Cristina y Marcelo- y a su compañero, Oscar Alfredo Zalazar.

Los niños fueron encontrados al poco tiempo pero el bebé que debió nacer entre agosto y septiembre de 1976 continúa desaparecido, al igual que María Ester.

«En este momento de dolor, abrazamos a la familia de Petrona y reafirmamos que seguiremos buscando a su nieto o nieta para transmitirle su legado», afirmaron desde Abuelas.