La Comisión de Legislación del Trabajo dio inicio al análisis de las siete iniciativas que proponen reducir la carga semanal a 40 o 36 horas.

La Cámara de Diputados comenzó a debatir este jueves un conjunto de proyectos que plantean la reducción de la jornada laboral. La Comisión de Legislación del Trabajo llevó adelante una reunión informativa que contó con la presencia de la ministra de Trabajo, Raquel ‘Kelly’ Olmos.

En el encuentro también participaron representantes de la CGT, CTA de los Trabajadores y Autónoma y especialistas de la Unión Industrial Argentina (UIA), así como de la Corriente de Abogados laboralistas ‘7 de Julio’.

La presidenta de la comisión, la diputada Vanesa Siley (Frente de Todos), recordó que la ley vigente que establece las 48 horas semanales data de 1929. «Estamos iniciando un debate para modernizar y actualizar la legislación laboral que cumpliría dentro de 5 años 100 años de establecida», destacó.

Durante la reunión se analizaron los siete expedientes que hay en la actualidad en el Congreso. Cinco fueron propuestos por legisladores del oficialismo (Claudia Ormaechea, Hugo Yasky, Sergio Palazzo, Eduardo Valdés y Mónica Litza), uno por el socialismo (Enrique Estevez) y el último por el Frente de Izquierda (Nicolás del Caño).

El objetivo es acordar un texto de consenso que contemple proyectos presentados por los legisladores de varios bloques que podrían confluir en una iniciativa para llevar de 48 a 40 ó 36 horas la jornada semanal, con lo que se busca mejorar la productividad y generar empleo. El debate continuará la semana que viene cuando la Comisión se vuelva a reunir en una nueva sesión informativa.

Los proyectos de reducción de la jornada laboral

Ormaechea afirmó que su propuesta busca «mejorar la distribución de los puestos de trabajo y en algunos sectores también la creación de puestos». Resaltó además que «este debate se ha dado en todo el mundo con pruebas pilotos con resultados muy favorables».

Por su parte, el diputado Valdés señaló que «los países de mayor índice Gini son los que están reduciendo la jornada laboral. Lo está discutiendo la derecha inglesa, o sea que no es ideológico. Ojalá demos el ejemplo en el mundo de que en Argentina se humaniza la vida económica, social y política».

Al presentar su proyecto, Del Caño señaló que la reducción de la jornada laboral beneficiará a quienes «tienen empleos formales, pero tienen que trabajar cada vez más para llegar a fin de mes», y al mismo tiempo «tiene el doble sentido de generar más puestos de trabajo».

«Los trabajadores del subte hace décadas conquistaron las seis horas, tuvieron que tomar más trabajadores y la concesión no desistió, porque sigue ganando plata», señaló. El diputado propuso «repartir las horas de trabajo para generar 1.100.000 puestos en las grandes empresas, y después progresivamente en el resto».